Visitadores médicos independientes de la industria
Equilibrar las fuerzas como primer paso a la hora de que los médicos se informen sobre los nuevos medicamentos de manera independiente de los delegados de ventas de las farmacéuticas. Así lo están haciendo en varios centros de salud de Cáceres. Avalados por la Consejería de Salud de Extremadura se ha formado a un grupo de 24 informadores médicos independientes de la industria para contrarrestar la información de ésta. Se trata de que los profesionales sanitarios sepan distinguir la “buena mesa” de la “cocina basura”; la información de la promoción. Así lo señala Luis Palomo, responsable de este Programa de Formación en Práctica Clínica Basada en la Evidencia.
Extremadura ha creado una Oficina de Evaluación de Medicamentos, similar a las ya existentes en otras regiones, que está elaborando informes detallados sobre fármacos, su seguridad, su eficacia, si aportan alguna novedad terapéutica y el coste de su uso por el sistema sanitario comparado con otros similares. Los farmacéuticos formados por esta institución rondan con su experiencia e información depurada los centros de salud extremeños mediante un formato similar en el tiempo al que ocupa la denominada visita médica.
De alguna manera es deshacer lo andado. Corregir los fallos de la «información» sobre medicamentos que proporcionan los laboratorios, pura propaganda. ¿No sería mejor reorganizar el trabajo de los médicos para que pudiesen atender bien a sus pacientes y disponer de tiempo para informarse con rigor sobre las novedades y las no novedades en medicina y así actualizarse? Hay médicos que se forman a sí mismos con los ingentes recursos que ofrece, por ejemplo, Internet.
«Estoy de acuerdo -me comenta Palomo-. De todas maneras piensa que recibir a los visitadores es completamente voluntario, que nadie obliga a recibir visita médica. Lamentablemente puedo contar con los dedos de la mano los médicos que conozco que no recibimos visitadores«.
En el mismo edificio de Cáceres, Luis Palomo comparte amistad con el farmacéutico Galo Sánchez y sienten una preocupación activa por los asuntos de la gestión del conocimiento, la formación médica continuada y el sostenimiento de la sanidad pública. Galo fue subdirector de Farmacia de Extremadura y es la otra voz cantante de este proyecto ambicioso.
La propia Oficina de Evaluación de Medicamentos de Extremadura forma farmacéuticos que de manera voluntaria hacen una visita de extensión que prefieren llamar por su nombre original outreach visit, para evitar el concepto visita médica. La iniciativa está desarrollándose en numerosos ambulatorios de Extremadura. Los farmacéuticos, elegidos por sus dotes como líderes de opinión, son enseñados con material de gran calidad sobre los medicamentos nuevos que van apareciendo en el mercado y que el sistema sanitario ha de costear. Es información exhaustiva e independiente. En un cuarto de año 30 farmacéuticos han recuperado su vocación y más de 300 médicos, de los 800 que encierran las consultas de los centros sanitarios extremeños, han practicado un vis a vis con los anteriores para recibir información real sobre nuevos fármacos.
El proyecto podría haber interesado a los laboratorios, al fin y al cabo estos honestos visitadores hacen lo que predican las farmacéuticas, informar a los galenos. Pero las conclusiones del análisis de la primera molécula que hizo el equipo de Galo no eran para tirar cohetes. La rosuvastatina, de la marca Crestor, fabricada por AstraZeneca, suspendió el examen. Calificación: NO SUPONE AVANCE TERAPÉUTICO. Alguien comentó que esto enfadó al laboratorio que engrasó la atención de sus abogados por si acaso. Alguien le estaba tocando los rebaños. Galo y Luis han entregado unas encuestas a los profesionales visitados para conocer su grado de satisfacción con la iniciativa. Según los resultados, la aceptación del proyecto y el grado de comprensión de la información son muy altos. Además el 83,3% de los médicos que habían respondido coincidían con las conclusiones del análisis, ponían en duda la relevancia clínica del medicamento.
El equipo extremeño continúa revisando otras nuevas moléculas y expandiendo su fórmula de vis a vis entre farmacéuticos y médicos.
Más info: Libros Traficantes de salud y La salud que viene.
No entiendo ¿por qué? todos los comentarios a este respecto desaparecieron entre el año 2008 y 2010. Todo lo referente a la industria farmaceutica y el trabajo de los visitadores médicos ha dejado de existir como noticia. A nadie parece interesarle este tema y mientras tanto la industria sigue lucrandose y los visitadores continúan con sus sueldos de más de cincuenta mil euros anuales más incentivos y con coches de empresa que en la mayoría de los casos cuestan por encima de los treinta mil euros. Y todo ello pagado con dinero público.
Mientras esto ocurre, todas las miradas se han dirigido hacia los funcionarios que siempre han tenido sueldos míseros en la mayoría de los puestos de la administración.
Que fácil es tener el poder en manos de uno y dirigir y hacer dirigir la mirada hacia donde interesa para no dejar ver la realidad. Despues de salir una serie de condiciones como era la receta por principio activo, el código ético de la industria farmacéutica, el número de visitas médicas para comerciales regulado por las distintas autonomías, y otras muchas triquiñuelas que actuaban como lavado de imagen de la industria, miramos el mundo y observamos que todo sigue igual. Los médicos siguen recibiendo a los visitadores en las cafeterías frente a los centros sanitarios y el número de recetas sigue aumentando debido a la presión que los visitadores ejercen. «Todos tenemos que vivir de algo». Esa es la excusa que emplean los delegados de ventas que lloran en voz alta para que el médico crea que tienen miedo y continuen dandoles beneficio. Sueldos que actualmente no tiene casi nadie en otros campos laborales. Sueldos, dietas y beneficios que siguen manteniendo las arcas del estado a pesar de la situación económica que nos rodea. Sin embargo lo cierto es que el gran poder de la industria está por encima de la crisis económica y la administración. Todo continua en silencio y las miradas se desvían en otras direcciones. ¿Hasta cuando seguirá esto?. Creo que es tan grande el poder que no tiene fin. Productos caros y de dudoso beneficio que continúan cifrando cantidades astronómicas de dinero directo a las farmacéuticas, a los visitadores y demás instrumentos relacionados con esta. Con un margen comercial desmesurado.
Jesus:
A pesar de que tu texto es de complicada lectura, entiendo que defiendes a ultranza la utilidad de los fármacos en el sistema sanitario y arremetes contra los visitadores médicos independientes por su elevado coste.
Respecto el primer tema, creo que te equivocas de debate porque en ningún momento se cuestiona que los fármacos no sean necesarios en el actual sistema sanitario. Lo que se cuestiona es que se inviertan gran cantidad de recursos en intentar comprar la prescripción de los médicos, dejando en un segundo plano la salud de las personas, y que estos métodos contribuyan a aumentar el gasto farmacéutico.
Respecto al coste que representan los visitadores médicos independientes, creo que los costes deben analizarse en función de los beneficios que reportan. ¿Y el coste de los visitadores médicos no independientes…? ¿Crees que su coste no repercute en los fármacos? Por cierto, fármacos que no salen al mercado ni a un euro ni a dos, como tú dices, sino a precios mucho más elevados que las moléculas originales modificadas en el caso de los «too me».
También se critica que los teóricos informadores técnico sanitarios son en la práctica vendedores agresivos en busca y captura de recetas. Por tanto, su función esencial y social queda absolutamente desnaturalizada mientras no se aparquen las prácticas de tarugueo que a pesar de los códigos éticos siguen a la orden del día.
Como tú dices, lo que muchos criticamos es que algunos se lo lleven calentito a costa de la salud de las personas. Es un derecho constitucional el intercambio de dinero y trabajo honrado, no la compra de voluntades.
Y a los juzgados van los que tienen algo que denunciar, no los que se dedican a informar a la opinión pública; para tu «tranquilidad», muchos de los asuntos aludidos están hace días en el juzgado.
Volvemos a perder la perspectiva. ¿De qué se trata este tema?. Se trata, en definitiva, de abaratar los costes de la prescripción farmacéutica.
La gestión de los recursos debe estar en manos de gestores «eficientes» y eso, por desgracia, abunda muy poco (por desconocimiento de la medicina, por intereses meramente políticos, etc.)
No seré yo quién de la solución (porque no es mi trabajo y no tengo tiempo para ello), pero opino que la misma no pasa por agredir a la Industria Farmacéutica cortando su «brazo armado» que son los visitadores. Ellos realizan su trabajo, al igual que nosotros realizamos el nuestro.
El comportamiento ético depende de cada uno de nosotros. Me hace gracia que se mencione la palabra cohecho (de Nikita) o «trapicheo» (De Josep M.) que nos «ofrece» Farmaindustria, cuando mi empresa (La administración, como la llama Artesano) me brinda la posibilidad de recibir 3000 € (al menos en mi Comunidad Autónoma) por el cumplimiento de objetivos. Y, además, me pone un ordenador que me DICE (independientemente de todos mis años de estudio, de formación y de mi experiencia) qué es lo que tengo que prescribir y qué no. ¿Esto es ético?, ¿es ético que tenga que prescribir fármacos genéricos a MIS PACIENTES, sabiendo que, por Ley, pueden contener un 20% menos de molécula que la marca original, por el simple hecho de que el «político» de turno quiera ponerse una medalla de «ahorro farmacéutico»?, ¿ustedes conocían el hecho de que para abaratar costes, los fabricantes de genéricos, ahorran en el excipiente (vehículo imprescindible para que el fármaco sea absorbido correctamente por el organismo)?, ¿es ético prescribir a los PACIENTES medicamentos que tienen, como mínimo, más de 10 años y que, independientemente de su efectividad, sabemos que pueden existir alternativas con mejor posología o menores efectos secundarios (para facilitar la adherencia a los tratamientos)?, ¿Es ético que la misma Administración que se embolsa un dineral para aprobar una nueva molécula (¡¡¡con cuatro ó cinco marcas diferentes!!!, cobrando por cada una de ellas), me diga luego que ese medicamento no aporta nada nuevo. ¿Esto no es «trapicheo»?, ¿esto no es cohecho?.
Ustedes me van a disculpar pero esto no es más que PURA hipocresía.
Yo estudié medicina y no economía, y, por tanto, me debo al Juramento Hipocrático que TODOS hicimos. Aquí parece que olvidamos nuestra verdadera finalidad: «EL PACIENTE».
El tiempo de los medicos (los visitadores), os puedo contar en que pierden el tiempo, pero os puedo asegurar que el mejor de ese tiempo son los visitadores, que a las 2 no esta ni el que apunta en el hospital, bueno si siempre queda alguno, pero que no entra a las 8.
Vamos Sres/@, somos tontos que Extremadura, que es la que más gasta por habitante y año de España (+350euros), se dedique a tirar el dinero de esa forma. ¿Cuantos?, 22 visitadores a 2000 euros sin seguros sociales al mes eso minimo son 44.000 euros al mes y 528000 año, sin dietas etc… pero en que estan tirando nuestro dinero. Para que si como decis por algun sitio Novedad Terapeutica que no aporta, decirme un farmaco que aporte algo en los ultimos diez años para algun organismo evaluador os digo que son 4 medicamentos. Por ejemplo si alguien se hubiese guiado por esto… leer la evaluacion del omeprazol, o de las estatinas, todo es malo?. No sera que los comites evaluadores tambien estan presionados por quienes les pagan?
Otro problema, si a un visitador de la Junta de extremadura, lo contrata un laboratorio, tendra informacion privilegiada?.
De verdad los más pobres tirando el dinero. No seria más interesante formar a todos los visitadores de Extremadura por parte de la Administracion, en buenas practicas eticas. Y que asi se certificaran?
Por cierto para ahorrar porque los servicios de salud no pagan en tiempo y plazo, y asi no nos cuesta a todos, tener que pagarlo con intereses, que puede ser más del 10%, se ahorraria la factura en ese tanto por cierto solo haciendo bien las cosas.
La etica empresarial esta cambiando dentro de la industria, pero que es tan malo el que da como el que se lo lleva a su casa calentito. Osea que no es solo la Industria a buen entendedor pocas palabras…
Pero lo que os digo la IF esta cambiando y mucho, pero claro tambien hay quien esto no le gusta, porque se hace rico con libros-blogs sobre lo que hacen mal los demás y no va a los juzgados. O despedidas, reprochonas que salpican la m… por su malestar.
Sres/@ me gustaria saber que harian los medicos sin farmacos, por cierto fabricados por esos perversos de la Industria, posiblemente se tendrian que marchar a casa.
Novedad, que es novedad la medicina avanza poco a poco y cada mucho tiempo se da un saltito grande. Novedad es todo aquello que sea nuevo y aporte algo a lo existente, que se debiera comparar con lo que ya hay.
Sabeis que cada paciente en investigacion para un farmaco nuevo en un hospital publico (cobra el investigador, la fundacion, el hospital…etc) puede estar en torno a los 10.000 euros, si multiplicas por cuantos pacientes tienen que estar en un Ensayo para que Emea o fda lo aprueben cuanto es el coste de la fase III, calcular por gusto,,, y luego que se venda a cuanto a 5 a 2 a 1 euro. que si veis la lista de los medicamentos comercializados en España el 80% vale menos de 2 euros, que esto no es una tienda de todo a 100 pesetillas.
Que el que quiera investigar que lo haga. Se habla de beneficios «desorbitados», pero sabeis cuanto gana un laboratorio, en neto (no facturacion), si la respuesta es que no, que no se diga lo que no sabes.
Por cierto sabeis cuanto se esta gastando el SAS en productividades a sus medicos?. Seria interesante tener el numero, porque pagar por lo que debes de hacer. y los 200000 euros que se ha gastado la consejera en condones de colores. No habria que educar a nuestros politicos sanitarios.
De acuerdo con la propuesta de Druida, seria la solución perfecta y definitiva. Pero tenemos una amenaza a nuestra utopia: los colegios de farmacéuticos que son un auténtico poder fáctico en nuestro país, con unos criterios éticos muy similares a los de la multinacional del medicamento ya que los intereses coinciden. Ellos no lo permitirian nunca.
Lo que sí ahorraría un verdadero disparate en sanidad, sería disponer dentro del mismo Centro de Salud una oficina de farmacia controlada por la administración. Se evitarían los cambios de medicación (tan normales hoy día) porque un auxiliar de farmacia dice que «es lo mismo pero ha cambiado el color de la caja y el nombre»…vamossss….., que por cierto…. no hay ninguno a primera hora en la farmacia (por ley deben estar). Y van precisamente a ofrecerse para ser ellos los que informen al médico de los últimos avances en medicina….¿no será que se quieren meter hasta en eso para seguir siendo los dueños de su cortijo?…por dar un detalle: En mi calle hay más de 8 bares…¿porqué no pueden haber 4 farmacias en la misma calle?….Botica=Trofeo Juan Palomo, y encima hasta ellos mismos se denuncian entre sí. Si es que la codicia saca lo peor de las personas, y los boticarios son los nuevos ricos de ahora.
Ale, a merendar.
Quizás mi propuesta es excesivamente «simple» pero considerando la experiencia quizás sería lo más adecuado pillar al toro por los cuernos e impedir que los médicos reciban a representantes de la industria, mientras se ofrece la alternativa de una información con el criterio de la empresa.
Al que no le guste el criterio de la empresa (la Administración) pues como en cualquier empresa: ¡estas son lentejas!
Por otra parte, la sugerencia del Dr. Josep M. de unificar las oficinas autonómicas de información y evalución, me parece económicamente imprescindible.
«Con esos horarios en los que despues del centro de salud o el hospital te tienes que ir a pasar consulta privada para poder llegar a fin de mes…»
Increíble, el único personal estatutario que puede ganar más que el presidente del gobierno sólo con el salario de un médico de familia (para lo que hacen es muchísimo dinero).
Se queja que no llega a fin de mes… ingresos medios de 3000€ netos, cómo era eso de tener la cara más larga que la espalda.
La información está en internet no se necesitan mulas para traer «información» de nuevos «medicamentos» será que en internet sólo hay información y no dádivas para llegar a fin de mes.
Apoyar la verdad relatada por Nikita: «Por ello, cuando estás dentro de este mundillo, no compartir estos métodos de trabajo tiene un precio muy alto, siempre incompatible con la continuidad laboral bajo coacción.»
Deduzco que podrias ser, o haber sido, representante farmacéutico y que, por tu ética personal, no querías hacer ciertas cosas «ilegales», o al menos eso parece de tu último párrafo.
En cualquier ámbito de trabajo ocurre lo mismo, pensar por uno mismo y tener ideas diferentes a las que te quiere imponer el sistema sale caro. La única salida es salirse del sistema y pasarlo mal en la supervivencia. Porque no se puede luchar desde dentro del sistema, eso es malgastar energía y, sobre todo, perder salud. Es dorar la píldora (nunca mejor dicho).
En mi caso de especialista y oncólogo, yo no estaba de acuerdo en hacer nada que no fuera medicina basada en la evidencia (que, dicho sea de paso ahora pienso que tampoco es el ideal), tampoco lo estaba en recibir constantemente representantes, en afiliarme a asociaciones, y tampoco creo que la única vía de tratamiento del cancer tengan que ser solo los fármacos con efectos secundarios desastrosos.
No fui coaccionado pero si quemado durante año y medio en el que se me negaba repetidamente la ayuda que necesitaba, ayuda que estaba justificada mediante un informe razonado y a la vez aprobada en presupuesto. Consiguieron finalmente que me fuera. Esto no se si es coacción, pero si mobbing encubierto.
Aunque esta iniciativa es buena para concienciar a la gente, el cambio no residirá en ella. El cambio sólo vendrá cuando los médicos y los pacientes asuman su poder, primero informándose de como nos manipulan y para qué, y segundo negándose a hacer lo que sabemos que no es ético hacer. Todo lo demás es supervivencia y miedo.
Un saludo.
Por ideas que no sea, y respetando absolutamente todas las que han sido lanzadas en este blog, considero que otra alternativa podría ser un organismo privado independiente de la industria farmacéutica que certificara la calidad de los estudios científicos susceptibles de ser presentados a los profesionales sanitarios y pudiera emitir opiniones basadas en evidencia científica siguiendo criterios y protocolos establecidos, cuadros comparativos de coste-beneficio, efectos secundarios… Su función sería la información y asesoramiento, a modo de staff, nunca proactivo sino en respuesta a las necesidades de información del prescriptor/centro de salud/hospital, con la excepción de las novedades terapéuticas. La finalidad fundamental sería el acceso a la información disponible de manera clara y transparente para facilitar la toma de decisiones de los profesionales a la hora de prescribir.
El coste de estos servicios debería asumirlo un grupo heterogéneo de colectivos, como la industria farmacéutica y las instituciones públicas sanitarias; no sé como, pero su mantenimiento debería estar sufragado por los dos, así como su gestión debería ser controlada bipartitamente también.
Como apuntaba Dr. Josep M. no sería necesaria una oficina en cada comunidad autónoma, sino que bastaría con una unidad central en cada país o de rango comunitario.
Bueno, pues una idea más de este espontáneo brainstorming que ha provocado el artículo de Miguel.
No creo que funcione durante mucho tiempo. Big Pharma controla la Food and Drug Administration, el New England Journal etc, como no va a controlar eso.
Más interesante a largo plazo sería lo siguiente: Los departamentos de Farmacia de los hospitales deberían tomar un papel mucho más protagonista. Sus farmaceúticos harían más que dispensar, y recabarían información, harían estudios de nuevos fármacos e informarían a los médcios dependientes del hospital. Auditorías sobre las conductas prescriptivas y doble ciegos sin ánimo de publicación, ayudarían a forjar una relación entre médicos y estos y los farmaceúticos y contables. Esto debería empezarse hacer con médicos en formación, el ego de los otros tiende a ser tan brillante como delicado. Las visitas médicas deberían estar supervisadas dentro del sistema de citas del hospital y la administración cobrar por ellas puesto que es un servicio que se da a la empresa y no al revés. Si se urga un poco algunos visitadores médicos no tienen ni idea y sin embargo hablan con una convicción de fundamentalistas. Además es indecoroso ver a estos sujetos colarse y hacer esperar a pacientes.
La idea en un sentido puro me parece correcta. Pero, seamos realistas, esa pureza NO existe. Aquí se habla de la intromisión perversa de la industria farmaceútica para que recetemos sus compuestos, pero no podemos olvidar que son ELLOS los que invierten en I+D (¿alguien me puede dar el nombre de alguna molécula que haya sido investigada y desarrollada en el ámbito del sector público?). Y, con toda lógica, como empresas privadas que son, esperan obtener un rendimiento. ¿Ahora nos rasgamos las vestiduras? ¿Gracias a quién sobreviven las sociedades médicas?, ¿gracias a quién podemos contar con los congresos para nuestra formación? Por favor dejémonos de demagogia.
Por otro lado, vale que la información que nos ofrecen pueda estar sesgada, pero NUNCA he recibido formación del sistema público (y si la he recibido, TAMBIEN está sesgada por los intereses públicos de ahorro farmaceútico). Afortunadamente contamos con nuestro sentido común, la práctica clínica diaria y nuestra experiencia, para extraer la verdadera información.
Todos tenemos que utilizar un arsenal terapéutico, independientemente de que la Industria Farmaceútica meta sus tentáculos o no. Ahora bien dejad que sea yo quien decida qué es lo mejor para mis pacientes (SIN intervención Privada NI pública).
A mi, con el debido respeto a otras opiniones de este blog, me entristece este sistema de funcionamiento tan propio de nuestro país (en bancarrota). Resulta que, si he entendido bien, la administración ha decidido enfrentarse a una dinámica perversa creando una estructura nueva que precisa de técnicos de titulación universitaria + supongo que refuerzo administrativo, ordenadores, espacio físico y mantenimiento del mismo, etc. Y probablemente si todo el mundo está satisfecho con este nuevo programa, la estructura original irá creciendo y creciendo. Y, argumento yo: ¿no sería más fácil y eficiente regular la visita médica de la Industria Farmacéutica en lugar de incrementar el gasto público? Propondría simplemente dos normas:
1ª únicamente se informará sobre las novedades y una sola vez (¿que sentido tiene la repetición del mensaje una y otra vez si estamos hablando de información, no de promoción?
2ª esta información no será en ningún caso de persona a persona sino grupal, es decir a grupos de profesionales (servicios hospitalarios, centros de salud, etc.).
De esta forma, se garantiza el acceso a la información y se evita el “trapicheo” que va unido al cuerpo a cuerpo visitador – médico. El problema es que la industria farmacéutica (IF), a pesar de que reduciría en gran manera el gasto, nunca aceptará de esta propuesta: va dirigida a la mismísima línea de flotación de su actividad perversa.
Las oficinas de evaluación de medicamentos son entidades que están en todas las autonomías y están demostrando desde hace tiempo la bondad de sus servicios. No obstante, en mi opinión existe una falta de eficiencia en la repetición de los mismos temas e informes autonomía por autonomía cuando una gran oficina dependiente directamente del Ministerio o incluso europea seria suficiente.
En mi centro de trabajo hace ya 10 años que seguimos por decisión consensuada por todos estas dos normas y puedo dar testimonio de que no tenemos déficits formativos, de que nuestras recetas se hacen siguiendo la evidencia científica disponible, de que imponemos nuestro criterio a la prescripción (pública y privada) inducida por terceros, disponemos de más tiempo útil lo cual no es ninguna tontería: he calculado que con el coste de las horas dedicadas a la IF en un año de todos los profesionales podríamos pagar a los médicos que nos sustituyen cuando es necesario. ¿No estamos en crisis?
Buenos días. ¿Probamos suerte don Miguel? ¿Se atreve? Atrévase. Total nada pierde.
Cromosoma 6.
6p21.2; 6p21.3; 6p22.1; 6p22.3.
¿A qué esto no lo hace nadie?
«El complejo mayor de histocompatibilidad (CMH o MHC, acrónimo para el inglés major histocompatibility complex), o complejo principal de histocompatibilidad, es una familia de genes ubicados en el brazo corto del cromosoma 6 cuyos productos están implicados en la presentación de antígenos a los linfocitos T».
http://es.wikipedia.org/wiki/Archivo:Chromosome_6.svg
Le diré una cosa: con lo del brazo corto acerté porque lo leí después. Fue la mano la que me llevó a el. A lo mejor estamos ante un nuevo procedimiento intuitivo de diagnóstico.
No estoy de broma. Y sé que con estas cosas me quemo. Pero no me importa si con ello desciframos algunos misterios.
La lucha contra el rechazo de órganos y la lucha contra las infecciones o invasiones ajenas. Incluso del propio cuerpo.
Me parece una excelente idea, pero sería excelentísima, y nos liberaría a los de Primaria de mucha «lucha», si estos visitadores fueran dirigidos a los especialistas. Actualmente son el objetivo número 1 de los laboratorios. En primaria estamos bastante más informados y concienciados de lo que es la industria farmacéutica.
El Crestor en concreto, casi lo conocí antes por la prescripción del cardiólogo que por visitadores o anuncios en revistas médicas.
Pero parece que nuestros servicios de salud no se atreven a hablar a los especialistas de prescripción racional, de calidad, etc.
Los visitadores médicos son meros instrumentos a merced de sus empresas, pero cada vez que ofrecen dádivas a los médicos funcionarios están cometiendo un delito tipificado en el código penal como cohecho. Hay una sentencia por cohecho del Tribunal Supremo en la que no sólo condenan al Administrador del laboratorio y al médico, sino también al visitador médico. Por ello, el sueldo del visitador médico paga algo más que sus ventas…
En el convenio laboral de Químicas, ni en ningún convenio de empresa, tampoco en ningún contrato de trabajo se especifica que el visitador médico tenga que negociar con los médicos recetas para conseguir cumplir con su trabajo.
En el reglamento que regula la visita médica, Real Decreto 1416/1994, de 25 de junio, por el que se regula la publicidad de los medicamentos de uso humano, no se especifica que el visitador médico tenga que «comprar voluntades». Por ello, cuando estás dentro de este mundillo, no compartir estos métodos de trabajo tiene un precio muy alto, siempre incompatible con la continuidad laboral bajo coacción.
Como iniciativa está muy bien.
Pero ni los laboratorios ni algunos médicos dejarán que esto ocurra, hay demasiados intereses. Aún funciona el «trueque», tu me haces tal número de recetas de tal medicamento y yo te doy a cambio…
Los visitadores son meros instrumentos, empleados que intentan hacer su trabajo.
Esto es información técnico sanitaria es su estado más puro. Espero que los tentáculos de la industria no conviertan a este nuevo grupo en un nuevo stake-holders al que dirigirse. No olvidemos que las estrategias de las farmacéuticas no se dirigen exclusivamente a los médicos sino que han ampliado su diana y se preocupan por estar presentes en asociaciones de pacientes, en las oficina de faramacia, enfermería, incluso en los organismos sanitarios oficiales.
Personalmente, me parece una proyecto razonable y necesario para nuestro sistema de salud. Si los laboratorios farmacéuticos necesitan delegados, me parece bien también, pero que no mezclen churras con merinas; y que respeten escrupulosamente las normas éticas y legales al promocionar sus productos.
Estoy de acuerdo en que los médicos debieran tener tiempo para su autoformación posgrado, ¿pero cuando?, con esos horarios en los que despues del centro de salud o el hospital te tienes que ir a pasar consulta privada para poder llegar a fin de mes… Por otra parte el hecho de que las «farmaceúticas» empiecen a sacar la artilleria quiere decir que la iniciativa beneficia al paciente y al profesional de la Medicina en detrimento del beneficio empresarial… Que a fin de cuentas es su principal objetivo.
Excelente iniciativa!!
En principio la idea parece buena.
Pero yo me pregunto:
-¿No es cierto que la ley prohibe las visitas de los «visitadores» en horario de consulta? Es evidente que el tiempo que pierden con ellos, se lo quitan a los pacientes. Deberia hacerse fuera del horario de atencion.
-Estos visitadores independientes: ¿Quien los contrata, de quien dependen? ¿De donde obtienen ellos la informacion que luego transmiten a los medicos? ¿Pueden compatibilizar este trabajo con otro relacionado con laboratorios?
En fin, espero que sea diferente de verdad a lo que sucede ahora.