Sobre la píldora para la Covid que desarrolla una compañía farmacéutica
La carrera entre farmacéuticas por ser la primera en colocar en el mercado la píldora de oro contra la Covid, ese fármaco que compita con las vacunas, continúa. La compañía Merck, Sharp and Dohme (MSD) y Ridgeback Biotherapeutics ha anunciado buenos resultados en los ensayos clínicos de la que sería la primera píldora antiviral para tratar la Covid.
El medicamento se llama molnupiravir y, siempre según lo que cuenta la farmacéutica, los resultados de los ensayos clínicos han mostrado que el riesgo de hospitalización o muerte por Covid se reduce a la mitad. Por ello, ha pedido su autorización en Estados Unidos.
La farmacéutica estadounidense ha explicado que detuvo antes de tiempo los ensayos para comunicar resultados provisionales después de detectar la reducción importante del riesgo: el 7,3% de los pacientes con Covid que habían tomado molnupiravir fallecieron por la enfermedad, frente al 14,1% que murieron en el grupo que recibió un placebo.
Pararon los trabajos para ir comunicando y por lo tanto haciendo marketing; ir «vendiendo» el producto sin esperar a completar los ensayos.
El análisis de los datos de 775 pacientes también mostró que ninguno de los que recibió el medicamento murió en los 29 primeros días del ensayo clínico, mientras que en el grupo placebo en ese intervalo de tiempo fallecieron ocho personas.
Según MSD, su píldora sería eficaz frente a diferentes variantes del virus, incluida la delta. Ahora se plantea un dilema que puede desembocar en una nueva guerra comercial entre farmacéuticas. Las vacunas Covid se aprobaron por un procedimiento urgente porque no había ningún tratamiento para la Covid validado.
¿Qué sucedería si llegase a aprobarse este fármaco? En teoría, que pasaría a ser el tratamiento de referencia para la enfermedad y las vacunas tendrían que seguir su curso lógico e ir completando los ensayos clínicos -se hicideron parcialmente- para demostrar completamente su eficacia y seguridad.
Es curioso que ya esté haciéndose marketing de un producto al que le queda bastante recorrido para documentar su supuesta valía mientras, por ejemplo, la ivermectina, un principio activo con mucha literatura científica detrás y que todo apunta a que podría ser un buen medicamento para tratar la Covid, parece que no interesa.
Será porque es un tratamiento que no está sujeto a patente alguna y sin embargo, esta nueva píldora de oro que nos anuncian lo produce una gran multinacional farmacéutica que lógicamente lo patentará y por lo tanto, venderá en exclusiva.
Al parecer, Merck se ha adelantado a Pfizer, que también está investigando un tratamiento similar y que como sabemos tiene en el mercado una de las vacunas para la Covid (para la que intenta que le aprueben la tercera dosis).
La ventaja de utilizar píldoras para la enfermedad reside en que permitirían tratar la Covid antes de que las personas contagiadas necesiten ser hospitalizadas. El tratamiento consistiría en tomar dos píldoras al día en pacientes a los que se acaba de diagnosticar la Covid y durante cinco días.
Veremos porque aunque la pandemia se está ya casi dando por finiquitada como puede comprobarse casi con seguridad que la Covid se convertirá en una enfermedad como la gripe, que vuelve todos los años y por ello las farmacéuticas siguen preparando nuevos tratamientos. Hay negocio.