Cómo se utiliza a las sociedades científicas para vender más la vacuna de la varicela Varivax

Curioso que el principal diario de los publicados en castellano, El País, haya tardado bastante más de un mes en hacerse eco de la polémica suscitada por el bloqueo en farmacias a la vacuna de la varicela Varivax. Lo hace preguntándose Varicela: ¿pasarla de niño o vacunarse?

Llama la atención que el autor del reportaje dedica la primera parte a explicar todo lo referido a la vacunación y luego ya en la segunda parte del texto hace alusión a la decisión de no vacunar contra la varicela y «dejarla pasar». Lo cierto es que la recomendación (que no obligación) oficial de vacunar contra la varicela es a partir de los doce años de edad y por lo privado se está haciendo entre los doce y 15 meses. No parece lógico que si la recomendación del propio laboratorio fabricante de la vacuna en su ficha técnica es que a los 12 años, otros la apliquen cuando quieran. Pero cada uno que elija con libertad, incluso quienes deciden no vacunar.

Me parece honesto explicar que hay estudios que cuestionan el aumento de casos de herpes y varicela relacionados con la vacunación en la infancia. No me parece honesto escribir que existe confusión (la ficha técnica explica bien claro cómo se usa ese medicamento) y menos aprovechar para meter en el saco a «los antivacunas«. ¿Qué tendrían que ver -si existieran- en lo que es un conflicto entre el laboratorio fabricante de un producto que está utilizando a las asociaciones científicas a las que financia para presionar al Ministerio en beneficio propio?

Tras los «antivacunas» llega, cómo no, la opinión de José María Bayas, el de las listas negras de críticos con las vacunas. De risa.

Mención aparte el aporte de Ángel Gil de Miguel, de la Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria (Sespas). Esta asociación se ha distinguido por la prudencia en el manejo de los problemas de las vacunas. Está por el uso racional de las vacunas y por la consideración de las dinámicas de las infecciones y de las respuestas de los humanos a las vacunas. Por ejemplo, no se sumó al vergonzoso «consenso» del año pasado para promover la vacuna de la gripe. Tuvo un excepcional seminario de su Grupo de Vacunas el año pasado y el 28 de este mes tendrá otro.

La REAP, también citada en el reportaje, está asociada con Sespas  y sí ha preparado un texto de apoyo al Ministerio en la cuestión de la vacuna de la varicela. Para mí que había ganas de mezclar a Sespas con otras sociedades científico-industriales, que no son más que representantes de las farmacéuticas; le han colado un gol a Sespas.

Insisto, tras la «polémica» se esconde el interés del laboratorio fabricante por adelantar «de facto» la edad de vacunación contra la varicela. Para completar el reportaje sería honesto haber citado aunque fuera en una línea que todo acto médico tiene consecuencias y que Varivax también ofrece reacciones adversas. Lo que es seguro es que si estas llegan ni Ministerio ni laboratorio querrán asumir sus responsabilidades.